2015/10/31

DOCUMENTACIÓN | MEMORIA | EL SECRETO DE GIL DE BIEDMA

Jaime en Oxford, en 1953 //

El secreto de Gil de Biedma.

Los textos no habían sido publicados por las alusiones personales y las referencias homosexuales. Lumen publica los diarios inéditos del poeta, 25 años después de su muerte.
Josep Massot | La Vanguardia, 2015-10-31
https://www.lavanguardia.com/cultura/20151031/54438506414/secreto-gil-biedma.html 

Han tenido que pasar 25 años desde la muerte de Jaime Gil de Biedma para que sus diarios inéditos vieran la luz. El actor Josep Madern, compañero sentimental del poeta, los depositó en la agencia Balcells, y consideró que las alusiones inmisericordes a personas aún con vida y las referencias homosexuales aconsejaban que no se hicieran públicos hasta pasado un tiempo. A principios de los años 90 su contenido aún abría heridas y Ana María Moix vio frustrado a última hora su intento de publicar el ‘Diario de 1978’ en Lumen. Ahora sí, la misma editorial publicará el 5 de noviembre ‘Diarios. 1956-1985’, con edición de Andreu Jaume.

El libro rescata el único diario publicado hasta ahora, ‘Retrato del artista en 1956’, y añade los diarios de 1959-1965, el célebre de 1978 (que es el más elaborado) y el de 1985, cuando ya estaba enfermo de sida. "Me preocupa -escribe el poeta desde París- el regreso a Barcelona, la tensión nerviosa de aguantar constantemente el tipo, de hacer frente a los rumores durante meses y meses, de esa tensión de la que me sentí aliviado cuando ingresé aquí. Mantener mi enfermedad en secreto, salvo para unos pocos íntimos, me parece cada vez más difícil". Gil de Biedma jugó hasta el fin de sus días -murió el 8 de enero de 1990, poco después que su madre y que Carlos Barral- la paradoja vital de proceder a una indagación interior sobre sí mismo (poeta, homosexual, miembro de la burguesía, alto ejecutivo de una multinacional, antifranquista) y vestir, al mismo tiempo, una máscara social en el trabajo (Tabacos de Filipinas), con su familia y con su entorno no literario.

Los diarios de los años sesenta son esenciales, en primer lugar, para revelar las claves de su obra poética. Andreu Jaume, que prepara una biografía del poeta, consigue que las notas a pie de página que acompañan el texto sean tan entretenidas y ágiles como ilustrativas y documentadas. Por ejemplo, un irónico acuse de recibo de un dolido Jorge Guillén al libro que le dedicó Gil: "Que alguien dedique a la poesía de Jaime Gil de Biedma un libro similar al que ­Jaime Gil de Biedma ha dedicado a la poesía de Jorge Guillén". O las pullas a Juan Goytisolo, los hermanos Panero o la fuga de Boa­della cuando fue detenido por el espectáculo ‘La Torna’.

Gil de Biedma, de cultura anglosajona, se sirve de los diarios para "adiestrarse en literatura" y también para encontrar una prosa de la intimidad y de las emociones que la pacata tradición española había negado y reprimido. "La sexualidad en general y la homosexualidad en particular -dice Andreu Jaume- no han tenido aquí un lenguaje que no estuviera profundamente impostado, cuando en Inglaterra y al menos desde el siglo XVIII nadie se escandaliza del contenido de los diarios íntimos".

Gil de Biedma es el burgués clásico, el ejecutivo que trabaja ocho horas diarias y el poeta promiscuo, ebrio, nocturno e izquierdoso. Todo a la vez, con todas sus contradicciones, sin distinguir el personaje que vive y el que escribe. En 1962 firma una carta contra la represión de una huelga minera en Asturias que le ocasiona una bronca familiar y casi el despido de Tabacos de Filipinas. Oscila del orden al caos y cuando cae en el exceso de alcohol y sexo, promete enmendarse y en seguida se desdice. La crisis existencial de Gil de Biedma se ve de forma más descarnada en sus cartas (‘El argumento de la obra’, Lumen). En los diarios es una queja constante desde 1956. Fue el año en que Jaime Gil tuvo una grave crisis que llevó latente como una carga de profundidad a lo largo de su vida, con intermedios de sosiego, aunque en 1966 se salvara de su etapa de crisis más grave, en casa de Gustavo Durán, en Aleneo, Grecia, el singular militar republicano y músico, amigo de Kavafis, al que vio como un segundo padre, como antes, en sus años de estudiante en Oxford, cuando se preparaba para la diplomacia (falló el examen de composición y cultura castellana), había considerado a Alberto Jiménez Fraud y a Natalia Cossío.

Gil de Biedma se ve a sí mismo, descarnado de los maquillajes del autoengaño, como si se hubiera corrido una cortina para mostrarle la verdad. "Saber que mi angustia de hoy no es otra cosa que la factura que pago por un día hermoso y feliz de fin de semana, debería servir al menos de alivio, pero no: cada vez que pago lo hago de buena fe, convencido de que al pagar me arruino para siempre", escribe. Y también: "¿Por qué huyo y de qué, lo ignoro. Quizá de alguna decisión moral: en el fondo de mi conciencia parece serpear la insinuación de que soy cobarde". Y más aún: "Parece haberse producido en mí un curioso proceso de desdoblamiento, que me lleva a observar el proceso de gradual desmoralización a que estoy sometido y a anticipar el posible desenlace -la desintegración de mi persona- como un espectador desinteresado. Es algo parecido a ser operado con anestesia parcial".

Andreu Jaume dice que Gil de Biedma inició un proceso de autodestrucción lento, progresivo e irreversible. El pavor por el paso del tiempo y la muerte es su música de fondo. ¿Cuál era su demonio interior? "La tensión constante entre la vida sensata, la realidad y la irrealidad. Jaime Gil -dice Jaume- se construye un mundo de irrealidades en lo íntimo, lo político y lo estético que, de repente, se derrumba, se da cuenta de que era absolutamente ficticio, de que no existe. A partir de ahí, tras su viaje a Filipinas y la sensatez pasiva de la que hablaba Gabriel Ferrater, se ve incapaz de construir otro mundo". Ese ser sensatos, decía Ferrater, sin tener razones para serlo.

La actividad sexual de Gil de Biedma es frenética y no le sacia ni evita su angustia. Quiere conciliar el amor duradero y el carnal efímero. En los diarios se explica la génesis de su mejor poema, ‘Pandémica y Celeste’, en el que según Jaume, intenta establecer una ética de la infidelidad y un amor sostenido en el tiempo, inspirándose en los versos de Catulo, el poeta latino que lee ávidamente en Deià, un canon que dejó de existir en Europa desde los trovadores. "Quiere demostrar que se puede estar profundamente enamorado de una persona toda la vida y serle constantemente infiel". Los trescientos amantes del poema de Catulo ("que viva y disfrute con sus amantes/ de los que abraza a trescientos a la vez/ sin amar a ninguno aunque una y otra vez a todos/ les rompa las caderas") quedan tal vez cortos según las referencias que Gil de Biedma anota en sus diarios, y el amor que consta más duradero es Luis Marquesán, antes de Josep Madern.

En 1985 el poeta contrae el sida y muere cinco años después. Madern, en 1994. Jaime Gil hacía tiempo que había dejado la poesía. Lo explica en su último apunte de 1978: "Nada más triste que saber que uno sabe escribir, pero que no necesita decir nada de particular, nada en particular, ni a los demás ni a sí mismo". No quería ser como Jorge Guillén o Vicente Aleixandre. En su final, caricaturas de sí mismos.
  • Fragmentos 
  • (Tàpies). Resulta verdaderamente irónico advertir cómo la estación final de llegada de los "no figurativos" es nada más y nada menos que el ‘trompe l'oeil’ y las artes aplicadas -lienzos que son muros manchados y agrietados, puertas viejas, huellas de zapatos, arenas de playa, todo perfectamente imitado. La verdad es que para este viaje no necesitábamos alforjas.
  • Los días en Formentor me han dejado mal sabor de boca, como casi siempre me ocurre con las reuniones de literatos. Para sobreponerme a mi timidez, bebo, y cuando bebo enseño los peores matices de mi persona. Luego, después, temo una visión de mí mismo que me inspira verdadero disgusto, y miedo, además, de que sea la verdadera.
  • La realización de ese imposible ideal de felicidad inmediata que, según Auden, duerme en el interior de todo animal humano, "getting drunk before noon and jumping naked from bed to bed" (“emborracharse antes del mediodía y saltar desnudo de cama en cama") .
  • Ayer me encontré con una nueva citación del juzgado militar y con la ingrata sorpresa de que las actuaciones contra Goytisolo, Carbonell y yo, que después de cada declaración doy siempre por suspendida, siguen adelante... Se me olvidaba apuntar las inculpaciones que se me hacen, o por lo menos la más graciosa, la de ser un activista catalanista y pertenecer a la Federación Universitarios Catalanes.
  • Lo mío es que ni siquiera tengo ambición de poder literario; el deseo de hacer una carrera no me roba ni un minuto. 
  •  Fragmentos (parte 2)
  • Juan (Goytisolo) era hace veinte años un malísimo escritor, cuyas novelas sólo hacía interesantes una cierta capacidad de fabulación y de creación de tipos disparatados que uno esperaba ver un día mejor empleada. En cambio, salir con él por la noche, recorrer bares y tugurios del distrito quinto era divertidísimo... Tenía una cualidad... que para sus compañeros de bureo nocturno resultaba impagable: bastaba que él entrara en un local para que toda la consuetudinaria fauna: camareros, putas, limpiabotas, chulos y floristas, empezaran a comportarse de una manera insólita y disparatada.
  • Felicidad (Blanch) es un personaje complicado y está muy bien: el único peligro es que anden por allá sus hijos, los tres hermanos Catafulco, que son un verdadero horror (Juan Luis, Leopoldo y Michi Panero)
  • Y por si fuera poco, están los habituales y estúpidos deberes de la necesidad erótica: te echo siempre de menos, pero mucho más después de acostarme con alguien, sobre todo, curiosamente, cuando lo he pasado bien.
  • Lo malo de las mujeres –para un ser humano civilizado, me refiero, que quiere que su pareja disfrute– es que tarden tanto en llegar al clímax. Hay momentos en que, a pesar del cansancio, uno se siente a punto para un poco de sexo; luego llega el dilusorio pensamiento de que para dejar a tu pareja satisfecha tendrás que trabajar unos quince minutos y decides que después de todo es mejor abstenerse.
  • Esto de vivir en una sociedad en que la obscenidad ritual no está aceptada resulta una desventaja demasiado grave.
  • Mi felicidad no es otra en el fondo que la de querer y que me quieran, sumada a la de encontrarnos el uno con el otro, inesperadamente rescatados de la rutina urbana, sin nada que hacer más que disfrutar del intermedio.
  • Lo que define la calidad de nuestra vida intelectual no son las ideas en que nos complacemos en formularla, sino el tipo de relaciones que mantenemos con ellas.
  • (Ya enfermo de sida) Empiezo a hacerme ilusiones de salir adelante y estos dos últimos meses me he sorprendido algunas veces pensando en el futuro. Eso está bien, pero también es peligroso; cuando el momento de ilusión pasa, el miedo lo resisto peor.

DOCUMENTACIÓN | MEMORIA | JAIME GIL DE BIEDMA: "MANTENER MI ENFERMEDAD EN SECRETO ME PARECE CADA VEZ MÁS DIFÍCIL"

Jaime se autorretrata en 1956, en Nava de la Asunción //

«Mantener mi enfermedad en secreto me parece cada vez más difícil»

Víctor Fernández | La Razón, 2015-10-31

https://www.larazon.es/cultura/mantener-mi-enfermedad-en-secreto-me-parece-cada-vez-mas-dificil-OJ11090907/ 

Se publican los diarios inéditos de Jaime Gil de Biedma, textos en los que el poeta habla sin tapujos de la creación de su obra literaria y del tratamiento que para tratar el sida, la enfermedad que acabó con su vida.

Procedente de Barcelona, el 21 de octubre de 1985, un enfermo del hospital Claude Bernard de París, ingresado primero bajo el nombre falso de Jaime Costos Sánchez y luego simplemente como «monsieur X», comenzó a escribir un diario. Era una manera de dejar constancia del tratamiento que iba a recibir después de que ese verano le fuera diagnosticado un sarcoma de Kaposi, primer síntoma del sida, por entonces una enfermedad poco conocida y con esacaso tratamiento médico. El paciente estaba expectante porque, «formado en la época de la penicilina como panacea universal, inevitablemente concibo el tratamiento experimental y precario que estoy siguiendo como una incógnita a despejar en pocas semanas: o me muero o sobrevivo, pero de una vez». A ello se le sumaba otro problema, el de «la tensión nerviosa de aguantar constantemente el tipo, de hacer frente a los rumores durante meses y meses, esa tensión de la que me sentí tan aliviado al ingresar aquí. Mantener mi enfermedad en secreto, salvo para unos pocos íntimos, me parece cada vez más difícil. En lo uno y en lo otro, si salgo adelante, será por el canto de un duro».

Jaime Costos Sánchez era el seudónimo de Jaime Gil de Biedma y estos fragmentos están extraídos de uno de los libros más esperados de la temporada, una obra que ha sido objeto de especulaciones y todo tipo de rumores desde que su autor murió. El próximo 5 de noviembre llegará a las librerías «Diarios 1956-1985», un volumen preparado con gran rigor por Andreu Jaume, estudioso del poeta barcelonés, y publicado por Lumen. Se recogen por primera vez, junto con el ya conocido «Retrato del artista de 1956», una serie de dietarios inéditos que nos recuperan lo mejor de la voz de un autor básico para comprender la literatura española de la segunda mitad del siglo XX. Procedentes del archivo de Gil de Biedma, guardado por la agente literaria Carmen Balcells, son otros materiales que forman esta obra: un extenso dietario que abarca entre 1959 y 1965, una de las etapas más sólidas creativamente del autor de «Las personas del verbo»; otro redactado en 1978, cuando trata de volver a escribir y, finalmente, el ya citado de 1985. Todo ello forma un ciclo autobiográfico de primer orden.

Una de las particularidades de la obra es que nos permite conocer el taller de escritura del poeta. Las páginas redactadas entre 1959 y 1965 nos ayudan a entender su manera de trabajar, el esfuerzo del poeta. Por ejemplo, el 19 de noviembre de 1963 comenzó a trabajar en el poema «Apología y petición»: «En mi proyecto de sextina, que cada vez me tienta más, aunque no sé si por razones extrapoéticas –i. e., la de hacer un tour de force que deje con un palmo de narices a los aficionados y a los críticos para quienes el tipo de poesía que yo hago constituye un síntoma evidente de incapacidad formal o de completa despreocupación».

En este sentido, también merece la pena destacar los momentos en los que habla de la elaboración de su ensayo «Cántico. El mundo y la poesía de Jorge Guillén», aunque el resultado final no fuera muy del agrado del autor de la Generación del 27.

También nos encontramos con un Gil de Biedma que habla sin tapujos de su homosexualidad, de sus relaciones con Luis Marquesán o Josep Madern. Este último, muerto también por sida en 1994, aparece reiteradamente en las páginas del diario de 1978, que se inicia con una bronca entre los dos amantes el día de fin de año en Ultramort, la finca ampurdanesa de Gil de Biedma. «Josep y yo, cada cual por su lado y los dos juntos, hemos sido envidiablemente felices. Quizá yo más que él, porque a las once de Nochevieja, cargado de whiskis y de sueño atrasado, y probablemente colapsado por un porro que no debí fumar, huí a la cama, dejándole con un palmo de narices, veinticuatro uvas y dos botellas sin abrir. Pero si sabe cabrearse bien –y es una cualidad suya que me gusta–, también sabe deponer luego las armas con gracia, en el justo momento. Ayer a mediodía, cuando sentados al sol nos bebimos la botella de champagne –sin uvas porque no las pedía ya la hora–, otra vez éramos la primera pareja reinante en la mejor de las Sodomas posibles».

El renacer de Barcelona
Tampoco falta el compromiso político y social de un poeta que nunca permaneció mudo ante la realidad de su país. Resultan especialmente conmovedores los pasajes en los que Gil de Biedma habla del renacer de Barcelona en los primeros meses tras la desaparición de Franco. La reflexión le surge mientras pasea por las calles de los viejos barrios de la capital catalana. En su dietario anota que «de todos los beneficios del cambio en nuestro país –tras la defunción del ya remoto Invicto– ninguno tan inmediatamente palpable, emocionalmente y personalmente remunerador como la recuperación de los barrios populares por sus gentes. Nada nos hace realizar de una manera tan incomparablemente directa la felicidad de la muerte de la dictadura».

Es un poeta desesperado por vivir la vida al máximo, beberse hasta la última gota de la noche en encuentros que son muchas veces una celebración de la amistad. Porque los amigos no le fallan y, por eso, en los diarios no pueden faltar nombres como los de Carlos Barral, Gabriel Ferrater, José Agustín Goytisolo o Juan Marsé.

Podemos también conocer de primera mano sus impresiones hacia todo tipo de lecturas, desde Cernuda a Nabokov: «He empezado a leer “Lolita”, un libro sobre el que me gustaría escribir. Divertido y nada casual parentesco entre Humbert Humbert y Alfred J. Prufock (...). El personaje, en realidad, deambula por buena parte de la literatura tardía en tradición simbolista. Es el equivalente de Charlot en la clase media educada y ex acomodada». Interesante son sus impresiones sobre Mario Vargas Llosa: «Los Vargas –él y ella, ligeramente mayor que su marido– son personas muy simpáticas, con esa especial fineza de los peruanos, un sí es no es dieciochesca».

2015/10/11

DOCUMENTACIÓN | MEMORIA | DÍA INTERNACIONAL DE LA 'SALIDA DEL ARMARIO'

Día Internacional de la "salida del armario".
Susana Domínguez | La Voz del Sur, 2015-10-11

[Enlace original cambiado, de modo que ahora no aparece como artículo de esta autora. Recogido en su momento por IGLU]

Hoy 11 de octubre, aunque pocos los saben, se celebra el Día Internacional para Salir del Armario. Y se celebra en esta fecha en honor a la segunda marcha nacional realizada en 1988 [i.e. 1987, la 'gran marcha' fue el año anterior y el Día se constituyó en 1988 precisamente en su memoria] en la ciudad de Washington, Pro-Derechos de la comunidad LGTB (Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales) y liderada por Jean O'Leary, una famosa activista lesbiana norteamericana, política y ex-monja del Convento de las Hermanas de la Humildad de María, junto con otros activistas, con el fin de concienciar a la sociedad en general sobre la realidad LGTB.

Salir del armario, aunque a mí particularmente no me gusta mucho la expresión, prefiero visible, es la expresión popular y conocida, que significa hacer pública voluntariamente la orientación sexual (gay, lesbiana o bisexual) o la identidad de género (transexual). Y hoy, 11 de octubre, es un día para tomar conciencia de la importancia de salir del armario, de hacernos visibles. Es un día para atreverse a revelar y visibilizar nuestra orientación sexual y/o identidad de género. Pues cuando salimos del armario y nos visibilizamos, le estamos diciendo alto y claro a la sociedad, que las personas LGTB... ¡Existimos!

Y con ello no estamos haciendo apología de nuestra sexualidad, como nos han reprochado miles de veces. Ya estoy muy harta de tener que escuchar una y otra vez que "los heterosexuales no vamos diciendo por ahí lo que somos, no tenemos día del Orgullo heterosexual, no llevamos banderas ni pancartas sobre nuestra sexualidad" y otras muchas, con perdón, estupideces. Pues claro que no lo van diciendo. Pero no lo hacen, porque no lo necesitan.

En el mundo y la sociedad en la que vivimos, existe lo que yo denomino "presunción de heterosexualidad", es decir, todos somos heterosexuales hasta que demuestres lo contrario. Por lo tanto, salir del armario no es decir lo que soy, sino precisamente lo contrario, lo que no soy. Pues yo no soy heterosexual y si no quiero que me traten como tal, no me queda otra forma que decir que soy lesbiana. Así que por favor, intenten entenderlo ya de una vez y no nos critiquen por querer ser honestos/as y vivir como somos sin escondernos.

Pero hoy también es un día para reivindicar y luchar. Un día para ayudar a todas las personas que aún viven encerradas en el armario y animarlas a ser valientes, a superar el miedo, a que den un paso al frente y que dejen atrás los armarios de una vez y para siempre. Un día para comprender que la invisibilidad es la peor de las discriminaciones, una forma de maltrato que nos impide vivir y mostrarnos tal como somos. Un día para que entiendan que la visibilidad es nuestra mejor arma contra la discriminación que sufrimos las personas LGTB. Por ello debemos ser visibles y salir del armario. Ya no caben excusas, es el momento de dar un paso al frente y de visibilizarnos, pues de no ser así, pocas cosas cambiarán para las personas LGTB, si no nos atrevemos a decir alto, claro y con orgullo... "Yo no soy heterosexual, Yo Soy LGTB".

Y si tenemos claro nuestro objetivo y verdaderamente queremos lograr la igualdad y acabar con la discriminación que sufrimos las personas LGTB, sabemos que la visibilidad es nuestra mejor arma. Pero para que sea realmente efectiva, necesitamos la visibilidad de "todas" las personas LGTB. Por lo tanto, debemos luchar para acabar con la invisibilidad en la que viven muchas de ellas. Personas invisibles y que pueden ser nuestros amigos/as, hermanos/as, compañeros/as de trabajo e incluso personas famosas, pero que el miedo, la discriminación y la LGTBfobia las lleva a renunciar a su propia identidad, a ser libres y visibles, condenándolas a vivir en el armario y la invisibilidad. Y por ello hoy, 11 de octubre, Día Internacional de la Salida del Armario, yo os animo a todas las personas LGTB a ser visibles y a... "salir del armario".

2015/10/09

DOCUMENTACIÓN | TESTIMONIOS | EL NOVIO DE ROCK HUDSON, LEE GARLINGTON, EXPLICA CÓMO OCULTARON SU RELACIÓN

El novio de Rock Hudson explica cómo ocultaron su relación.
El que fuera pareja del fallecido actor durante tres años, cuenta que acudían juntos a los estrenos pero con compañía femenina.
El País, 2015-10-09
https://elpais.com/elpais/2015/10/09/estilo/1444405426_144274.html 

"Él era un amor y yo lo adoraba", ha dicho Lee Garlington sobre Rock Hudson, con quien mantuvo una relación sentimental de 1962 a 1965. En el treinta aniversario de la muerte del actor, este corredor de Bolsa jubilado recuerda cómo fue su noviazgo y cómo ocultaron su homosexualidad en la década de los sesenta, cuando todavía no estaba aceptado socialmente.

Rock Hudson se refirió a Garlington en su biografía como "mi verdadero amor" y, este año, el hombre que ocupó el corazón de uno de los galanes de Hollywood, ha relatado a los medios parte de su historia de amor. "Le esperé fuera de su caravana en los estudios de Universal Pictures, fingiendo leer Variety (aunque probablemente tenía la revista boca abajo) y cuando salió, me miró un momento y se marchó", recuerda el amante del actor.

Un año más tarde, Garlington recibió una llamada para conocer a Hudson. "Estaba muy nervioso, pero él me ofreció una cerveza y entonces sucedió", dice el antiguo corredor de bolsa, de 77 años. "Pasé con él la noche y me fui a las 6 de la mañana en mi coche con el motor apagado para que los vecinos no me escucharan. Pensábamos que estábamos siendo muy inteligentes", explica.

El examante de Hudson ha contado que acudían juntos a los estrenos de películas, pero con compañía femenina para no levantar sospechas. "Rock nunca me pidió que lo mantuviera en secreto porque yo ya sabía que tenía que ser así". Pero al cabo de un tiempo, una fan irrumpió en la casa del actor y les pilló durmiendo juntos. "Empezamos a ser más cautelosos", cuenta Garlington.

Uno de los recuerdos favoritos de Garlington fue cuando estaban preparándose para acudir a un evento y Hudson le dijo que le tenía que enseñar a afeitarse correctamente. "Me enseñó cómo coger la cuchilla y ponerla en un ángulo que cortaba mucho mejor", afirma el que fuera pareja de la estrella de Hollywood.

Ambos se separaron en 1965. "Uno de los motivos por los que rompimos nuestra relación era porque yo, de alguna manera, necesitaba una figura paternal y él no era lo suficientemente fuerte como para asumirlo", asegura Garlington. Perdieron el contacto a raíz de que el icono de la gran pantalla revelara, en 1985, que sufría sida. "Me sorprendió. El sida estaba matando a todo el mundo en aquella época. Llamé a las personas que lo estaban cuidando, pero me dijeron que estaba tan enfermo que no me iba a reconocer y que lo mejor es que guardara la imagen de cómo era él antes".

Tras su muerte, se publicó la biografía de Rock Hudson y allí descubrió su expareja que el actor había dicho sobre él que era su verdadero amor. "Dijo que su madre y yo éramos las únicas personas a las que había amado alguna vez. No sabía que significara tanto para él", dice Garlington.

2015/10/01

DOCUMENTACIÓN | MEMORIA | JOSÉ LUIS GARCÍA MARTÍN: "GIL DE BIEDMA NO ES EL SÍMBOLO GAY EN EL QUE LE HAN CONVERTIDO"

García Martín: «Gil de Biedma no es el símbolo gay en el que le han convertido».
La rumana Ioana Gruia se alza con el Premio Alarcos de Poesía con su obra 'Carrusel'.
A. Villacorta / I. Rey | El Comercio, 2015-10-01
https://www.elcomercio.es/culturas/libros/201510/01/garcia-martin-biedma-simbolo-20151001001754-v.html 

El espíritu de Jaime Gil de Biedma sobrevoló ayer el salón de actos de la Biblioteca de Humanidades del Campus del Milán, donde la Cátedra Emilio Alarcos Llorach organizó un encuentro literario con el que rindió homenaje al poeta con motivo del 25 aniversario de su muerte.

Porque, como aseguró Josefina Martínez, viuda de Alarcos y directora de la Cátedra, Gil de Biedma fue «la voz poética quizás más viva, directa, personal y descarnadamente autobiográfica de la llamada Generación del 50». Una voz que era, al tiempo, resumió la catedrática de Lengua Española, «la represión y la culpa, el remordimiento de clase de un señorito adinerado, de familia monárquica, metido a revolucionario», acompañada por una «falta de indulgencia consigo mismo que contrasta con una profunda voz melancólica». Con varias constantes en su poesía: «Sobre todo, el amor y la sexualidad desesperada, y la presencia aterradora del paso del tiempo».

Pero es que, además, resumió Martínez, el barcelonés era «un hombre que no se mordía la lengua» y a quien «no le temblaba el pulso si tenía que emitir un juicio inconveniente fuera quien fuese el destinatario. Como cuando dijo de Juan Ramón Jiménez: 'Nunca le embargó el pudor de disimular lo que en él había de pelendrín, de mezquino y malicioso señorito de casino de pueblo de Huelva».

Tampoco la directora de la Cátedra Alarcos titubeó a la hora de agradecer la presencia de los representantes de Somos en el Ayuntamiento de Oviedo -Ana Taboada y Fernando Villacampa- para recomendarles, acto seguido, «no acabar con todo», toda vez que «son jóvenes y acaban de llegar». Destacó también el poeta Carlos Marzal de Gil de Biedma «esa voz propia, mitad melancólica, mitad cínica, de su poesía», los versos con «un tono de bolero» del «mejor poeta erótico de su generación», que contaba con «una legión de merecidos admiradores». «La herencia que ha dejado en la poesía española ha sido inmensa», sentenció Marzal. Y eso que «deja de escribir muy pronto, lo que le rodeó de un halo de leyenda», porque, además, «muere relativamente joven y víctima de una enfermedad de la que en aquel momento (1990) se sabe poco: el Sida».

Quizá por eso el escritor José Luis García Martín se dedicó a desmontar los tópicos que rodean a quien «en el 70 era ya un mito», además de «la inteligencia absoluta, la caballerosidad, la cortesía, un caballero inglés antiguo». Eso, «hasta que llegó, para fastidiarlo todo, un señor llamado Miguel Dalmau, que escribió la biografía más horrorosa que se puede hacer de un poeta. Supongo que Gil de Biedma se levantaría en su tumba».

Porque, según el profesor y crítico, lo que hizo Dalmau fue «buscar una expareja de Gil de Biedma», algo así «como si uno se divorcia, buscan a su exmujer, que le odia, y todos los chismes que le cuenta los escribe en un libro sin contrastar nada, una cosa ofensiva que solo pasa en España». Y, para colmo, recordó, «luego se hizo una película con aspectos de la vida que él no quería que formasen parte de su vida pública: sus relaciones sentimentales». «Sería como hacer una biografía de Leopoldo Panero, que era muchas cosas, pero también se emborrachaba con cierta frecuencia y visitaba prostíbulos, y que solo se contasen sus relaciones con las señoritas», zanjó.

De ahí, resumió el colaborador de El Comercio, que «el mito que le convierte ahora en un símbolo gay, escandaloso, en cierto modo tapa lo que él quiso ser». Lejos de eso, aseveró, «Gil de Biedma es un poeta erótico, pero a su manera. Habla del amor. No habla del amor homosexual. No entra en detalles. No es Luis Antonio de Villena. No escribe para un gueto. Escribe para todo el mundo». Y, así, reclamó «que se le vuelva a leer al margen de las peripecias de su vida personal». Mientras, Luis García Montero defendió que el poeta, al que se le negó la entrada en el PCE, «sabía que en la España en la que vivía ser homosexual no iba a ser entendido».

Ya por la tarde, los protagonistas del tributo se trasladaron al Palacio del Conde de Toreno, donde se falló el Premio Alarcos de Poesía, que recayó en Ioana Gruia por su obra 'Carrusel', presentada bajo el seudónimo Anna Wulf. Gruia (Bucarest, 1978) enseña Literatura Comparada en la Universidad de Granada y ha publicado la novela 'La vendedora de tiempo'; los libros de poemas 'El sol en la fruta' y 'Otoño sin cuerpo'; el ensayo 'Eliot y la escritura del tiempo en la poesía española contemporánea' y el cuento 'Nighthawks'.

El jurado, presidido por Luis García Montero, la eligió por unanimidad y destacó «la intensidad lírica con frescura literaria y una poesía con reflexiones sobre la identidad y la infancia y con tratamiento poético de la identidad femenina» y Gruia se declaraba, poco después, «muy feliz» por alzarse con «un premio tan prestigioso» -dotado con 7.200 euros y acompañado por la publicación del libro- y al que se presentaron 150 poemarios. Durante el acto, clausurado por un recital, también tuvo lugar la presentación de la obra ganadora del Premio Emilio Alarcos 2014, titulada 'Saber de grillos', de Vicente Gallego.

MIKEL/A, AQUÍ ESTAMOS Y NO NOS OCULTAMOS

Mikel/a enseña cacho en la 2ª Gayakanpada de EHGAM, 27-29 agosto 1993, Muxika // Este trabajo, no podría ser de otra manera, está dedicado e...