Homosexuales, lesbianas y travestidos llevan su orgullo a la calle.
EFE | El País, 1996-06-29
https://elpais.com/diario/1996/06/30/madrid/836133862_850215.html
EFE | El País, 1996-06-29
https://elpais.com/diario/1996/06/30/madrid/836133862_850215.html
Más de 2.000 personas, según la Policía Municipal, y unas 4.000 según los organizadores, participaron ayer en la marcha lúdica organizada en Madrid para celebrar el Día del Orgullo de Gays, Lesbianas y Transexuales, y que transcurrió desde la Puerta de Alcalá hasta el Puerta del Sol. En España hay unos tres millones de homosexuales inscritos en asociaciones; de ellos, un millón viven en Madrid.
Representantes de las entidades organizadoras, los Colectivos de Gays y Lesbianas y el Feminista de Lesbianas, Radical Gay, LSD, Transexualia, CRECUL y Rosa que te quiero Rosa, explicaron que la manifestación era de carácter lúdico, pero que tenía muchos objetivos reivindicativos, como el reconocimiento en la ley de las parejas de hecho y el derecho de adopción. El presidente del Colectivo de Gays y Lesbianas de Madrid, Pedro González Zerolo, explicó que en España hay unos tres millones de homosexuales inscritos en asociaciones, de los que un millón viven en Madrid. Observó que en la marcha de este año se había elegido el lema ‘Visibles’, porque, dijo, "no tenemos de qué avergonzarnos.
La necesidad de atender psicológicamente a los homosexuales, informarles para prevenir enfermedades como el sida o asistir a los que lo padecen "son las funciones que cumplen estas asociaciones", dijo González Zerolo".
De esta misma opinión es Mili Hernández, otra militan te feminista y lesbiana, quien refirió: "Nos queda mucho por conquistar hasta que se nos llegue a considerar social mente normales". Aunque reconoció Hernández que el Gobierno socialista les ayudó al introducir en el nuevo Código Penal la penalización de la discriminación en materia de sexo y les reconoció el derecho de subrogación en la Ley de Arrendamientos Urbanos, "ahora, con el PP", comentó, "sólo vamos a encontrar impedimentos, porque no les gustamos".
"Música festivalera"
La manifestación fue un espectáculo festivo que afluyó, desde las siete de la tarde hasta pasadas las ocho, bajo los 30 grados a la sombra que había en Madrid, entre música festivalera, efluvios de un penetrante perfume de rosas, estrambóticos disfraces de travestidos, tacones, escotazos, parejas del mismo sexo, sobre todo hombres, abrazados y exhibiendo, ataviados con pantalón corto y camisetas ceñidas, bronceados músculos. Una orquestina de lesbianas abría la marcha, a la que seguía una carroza repleta de trasvestidos que lucían carnavalescos atuendos en oros, platas, o simplemente mostraban sus desnudos glúteos.
Representantes de las entidades organizadoras, los Colectivos de Gays y Lesbianas y el Feminista de Lesbianas, Radical Gay, LSD, Transexualia, CRECUL y Rosa que te quiero Rosa, explicaron que la manifestación era de carácter lúdico, pero que tenía muchos objetivos reivindicativos, como el reconocimiento en la ley de las parejas de hecho y el derecho de adopción. El presidente del Colectivo de Gays y Lesbianas de Madrid, Pedro González Zerolo, explicó que en España hay unos tres millones de homosexuales inscritos en asociaciones, de los que un millón viven en Madrid. Observó que en la marcha de este año se había elegido el lema ‘Visibles’, porque, dijo, "no tenemos de qué avergonzarnos.
La necesidad de atender psicológicamente a los homosexuales, informarles para prevenir enfermedades como el sida o asistir a los que lo padecen "son las funciones que cumplen estas asociaciones", dijo González Zerolo".
De esta misma opinión es Mili Hernández, otra militan te feminista y lesbiana, quien refirió: "Nos queda mucho por conquistar hasta que se nos llegue a considerar social mente normales". Aunque reconoció Hernández que el Gobierno socialista les ayudó al introducir en el nuevo Código Penal la penalización de la discriminación en materia de sexo y les reconoció el derecho de subrogación en la Ley de Arrendamientos Urbanos, "ahora, con el PP", comentó, "sólo vamos a encontrar impedimentos, porque no les gustamos".
"Música festivalera"
La manifestación fue un espectáculo festivo que afluyó, desde las siete de la tarde hasta pasadas las ocho, bajo los 30 grados a la sombra que había en Madrid, entre música festivalera, efluvios de un penetrante perfume de rosas, estrambóticos disfraces de travestidos, tacones, escotazos, parejas del mismo sexo, sobre todo hombres, abrazados y exhibiendo, ataviados con pantalón corto y camisetas ceñidas, bronceados músculos. Una orquestina de lesbianas abría la marcha, a la que seguía una carroza repleta de trasvestidos que lucían carnavalescos atuendos en oros, platas, o simplemente mostraban sus desnudos glúteos.