2017/11/30

ARTÍCULOS | Enguix, Begoña | «No desfilamos, nos manifestamos»: activismos y manifestaciones LGTB en España.

Enguix, Begoña (2017) [11]. «No desfilamos, nos manifestamos»: activismos y manifestaciones LGTB en España. Onteaiken [Argentina] 24, 40-55.
 
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La idea de convocar una manifestación anual -una estrategia política de protesta originada en el siglo XIX en relación con las luchas obreras- fue (y sigue siendo) una idea muy acertada. Permite la movilización y la participación en distintos lugares y momentos.

La manifestación es la estrategia expresiva más importante de los movimientos sociales. En consecuencia, la manifestación estatal del Orgullo LGTB es considerada como el acto central de las celebraciones del Orgullo y del activismo LGTB en España.

La manifestación estatal del Orgullo LGTB de Madrid es la manifestación LGTB más grande de Europa y la segunda más grande del mundo, según datos de la organización.

Está convocada por COGAM (Colectivo LGTB+ de Madrid), uno de los colectivos LGTB con más socixs de España (unxs 400 socixs). En la organización participa también la Federación Estatal de LGTB (FELGTB) que acoge a colectivos LGTB de todo el Estado. Año tras año la manifestación saca a la calle a más de un millón de personas, según datos de lxs organizadorxs. Se celebra en julio y no a finales de junio para permitir la participación de los colectivos que forman la FELGTB, que celebran en sus respectivas provincias las manifestaciones en torno al 28 de junio para conmemorar las revueltas de Stonewall.

Las manifestaciones del Orgullo simbolizan “el paso de la Gemeinschaft a la Gesellschaft, de la comunidad gay a la cultura gay nacional” (Herdt, 1992: 11). Son un modo de desestabilizar y enfrentar los procesos de la opresión lgtbfoba mediante la ocupación de los espacios públicos. Mediante la conversión del estigma y la vergüenza en orgullo, de los “homosexuales” en gays y lesbianas y del armario en visibilidad, las manifestaciones del Orgullo demuestran ser simbólicamente eficientes. Estas manifestaciones pueden ser consideradas como expresión de poder (Israel, 2006), como parodia y reverso (Toscani, 2005), como instrumentos de ruptura simbólica (Cruces, 1998), como ritual de inversión (Turner, 1988) y como parte de complejos procesos de globalización y transnacionalización de lo identitario (Altman, 1996). Eribon considera que esta celebración para afirmar el derecho a existir ha modificado la definición tradicional de la política como antes hizo el movimiento feminista (Eribon, 2000: 31).

Entendidas como “acciones colectivas resultado de la redefinición del espacio público operado entre expresiones y episodios del conflicto” (Scribano, 2003: 85) las manifestaciones del Orgullo ocupan las zonas centrales de las ciudades españolas donde se celebran. Con esta ocupación se suspende el funcionamiento cotidiano, se transgreden normas no articuladas y se desnaturaliza la heterosexualidad del espacio público (Johnston, 2001: 190). Elementos antes íntimos y privados -la sexualidad, los afectos y la emoción- devienen centro de un debate político sobre la igualdad, la diferencia y los derechos.

2017/11/27

LIBROS | Martínez, Ramón | Lo nuestro sí que es mundial : una introducción a la historia del movimiento LGTB en España

Martínez, Ramón (2017) [11-27]. Lo nuestro sí que es mundial. Una introducción a la historia del movimiento LGTB en España. Barcelona [etc.]: Egales.

En apenas cuatro décadas el «Movimiento LGTB» ha transformado España. Un país que en 1975 se declaraba mayoritariamente favorable a la eliminación de la homosexualidad a través de leyes represivas es hoy, gracias a la reivindicación política de lesbianas, gais, bisexuales y transexuales, uno de los Estados que más derechos y libertades garantiza a las personas no heterosexuales, y que en 2013 defendía en un 88% que la diversidad sexual y de género debe ser reconocida e integrada en la sociedad.

¿Cómo ha sido posible esta transformación radical? Los partidos políticos de todas las ideologías no siempre se interesaron tanto por los derechos LGTB como ahora lo hacen –o fingen hacerlo–, y durante muchos años lesbianas, gais, transexuales y bisexuales tuvieron que organizarse para conseguir, primero, la eliminación de la legislación represiva y, después, el paulatino reconocimiento de derechos que llevó hasta la consecución del Matrimonio Igualitario. Pero queda mucho trabajo por hacer hasta la erradicación de la homofobia, transfobia y bifobia, y la mejor forma de comprender el presente y elaborar una reivindicación adecuada con vistas al futuro es conocer nuestro pasado: responder a la pregunta ¿de dónde venimos? puede ofrecer las claves necesarias para afrontar otras cuestiones como quiénes somos y hacia dónde nos dirigimos.

Este libro ofrece un análisis del desarrollo histórico del «Movimiento LGTB» en el Estado español a través de numerosa documentación y bibliografía y de los testimonios de sus protagonistas; y recupera la genealogía de la lucha social de lesbianas, gais, bisexuales y transexuales en defensa de sus derechos como herramienta para seguir elaborando un discurso reivindicativo que, más allá de un WorldPride, pueda seguir diciendo con la voz bien alta que lo nuestro sí que es mundial.

«El trabajo de Ramón Martínez traza con encomiable precisión una genealogía compleja de lo que es el movimiento. [...] El inmenso valor de ‘Lo nuestro sí que es mundial’ es entrar en los callejones sin salida, en los atajos y en los terrenos pedregosos, en los errores y en los triunfos, contar cómo se ha llegado hasta aquí y rescatar una historia casi olvidada, dando nombres, resucitando voces.» -- Alberto Mira

2017/11/20

DOCUMENTACIÓN | MEMORIA | EL TABÚ SOBRE LA HOMOSEXUALIDAD DE GARCÍA LORCA

El tabú sobre la homosexualidad de García Lorca.
Manuel Tirado | Nueva Revolución, 2017-11-20

https://nuevarevolucion.es/el-tabu-sobre-la-homosexualidad-de-garcia-lorca/

La editorial Seix Barral publica ahora una nueva edición de ‘Confieso que he vivido’, las memorias en las que Pablo Neruda trabajó hasta poco antes de su muerte, en 1973, en la que ahora se incluyen textos inéditos del Premio Nobel chileno, entre ellos uno sobre Federico García Lorca titulado ‘El último amor de Federico’, en el que se cuenta la relación que mantuvo el poeta granadino con Rafael Rodríguez Rapún, desencadenante de los ‘Sonetos del amor oscuro’.

Habría que preguntarse la razón por la que Neruda decidió no publicar en los años 70 un texto donde se hablaba libremente y sin ningún complejo de la homosexualidad de Federico. Pues pienso que el chileno, sin duda, creía que la sociedad de aquella época todavía no estaba preparada para conocer esta historia y que sería fatal para la reputación de la obra de Federico. Neruda se hizo la siguiente pregunta: “¿Está el público suficientemente desprovisto de prejuicios para admitir la homosexualidad de Federico?”.

Hoy en día parece que el tema está superado y digo “parece” porque en realidad todavía no lo está. Desgraciadamente seguimos bajo la influencia de cuarenta años del franquismo y de la herencia eclesiástica que todavía hoy, desde los púlpitos, arremete contra los homosexuales. Una herencia que hace que un libro de texto para alumnos de la ESO de una muy famosa editorial nacional no diga que Federico fue asesinado por “rojo y maricón” y simplemente trate de adoctrinar (palabra desgraciadamente muy de moda en estos días) a los más jóvenes en que Federico simplemente “murió” en la Guerra Civil.

Más de ochenta años hace ya de cuando a Federico “se le vio, caminando entre fusiles, por una calle larga, salir al campo frío, aún con estrellas de la madrugada”, como dejó escrito Antonio Machado, otra víctima del régimen franquista, que murió solo y exiliado en Colliure, tres años más tarde del comienzo de la contienda, y desgraciadamente todavía algunos se ruborizan frente a la homosexualidad de Lorca.

Cuando no llegaba ni a los cuarenta años de edad cortaron la vida y la obra de un poeta que había llegado a unas cotas de lirismo excepcionales y con su asesinato no nos dejaron disfrutar de su futuras, y ya imposibles, obras. Con la República pasó lo mismo. No dejaron florecer ese grito de libertad del pueblo, esa explosión de júbilo y cultura que se vio reflejada en las misiones pedagógicas y en experimentos teatrales como ‘La Barraca’, etc., ya que tras unos pocos años de luz reflejados en la República, llegaron más de cuarenta años de oscuridad, de dictadura, de “pan y cebolla”, como diría Miguel Hernández, cuarenta años de nacionalcatolicismo del que desgraciadamente todavía sufrimos las consecuencias.

Porque Lorca representaba todo lo contrario a esa España negra descrita por Solana en sus cuadros, de esa España de incienso y procesión, de achicoria y martes de carnaval, de curas sentados a la mesa del señorito del pueblo dilucidando el futuro de las almas de los pobres jornaleros. ¡Ojo! Y Lorca participó de los clichés que se relacionaban con la España de siempre, esa España de toreros y cantaores de flamenco que tanto buscan hoy en día los guiris en las cuevas del Sacromonte granadino.

Pero la visión de Lorca de España y de Andalucía era totalmente distinta a la habitual. Así lo dejó escrito Francisco Umbral en su libro ‘Lorca, poeta maldito’, donde se esboza la idea de que Lorca fue el único poeta maldito de la poesía española, precisamente porque "es el cantor de las tres grandes razas postergadas de nuestra civilización: los gitanos, los negros y los homosexuales".

Lorca, en Granada, está con los gitanos frente a la Guardia Civil, frente al orden establecido. Lorca, en Nueva York, está con los negros, está con Harlem frente a Wall Street. Lorca, en su ‘Oda a Walt Whitman’ y en sus ‘Sonetos del amor oscuro’, libro póstumo y a la vez mítico, canta a la pasión que no se atreve a decir su nombre. Lorca es, radicalmente, “un hombre en contra”. Y ahí es donde radica la diferencia.

Este es el Lorca revolucionario, el Lorca que mataron por rojo y homosexual, el Lorca tan lejano de esa España que trajeron Franco y los curas, esos mismos que trataron de vestirlo y simplificarlo a la imagen del voluble señorito andaluz que tocaba el piano y escuchaba la guitarra. Y por lo que seguramente Neruda no quiso incluir ese texto en sus memorias, porque la gente no estaba preparada para entender que Lorca es el poeta de los olvidados, de los reprimidos, de los perseguidos, de los que se sienten “asesinados por el cielo”, de los que no caben en esta sociedad por amar distinto, por ser distintos.

¡Cuán necesaria sigue siendo tu voz, Federico! Y mucho más en esta España que sigue siendo un país, como bien dijiste en tu monumental poema ‘Grito hacia Roma’, donde “no hay más que un millón de herreros forjando cadenas para los niños que han de venir”. Las cadenas que desgraciadamente nos ponen los de siempre y que nos impiden pensar libre.

2017/11/16

DOCUMENTACIÓN | MEMORIA | "LA FAMA LES LLEGÓ A LAS GRECAS SIENDO UNAS CRÍAS; LAS USARON Y YA"

“La fama les llegó a Las Grecas siendo unas crías; las usaron y ya”
Saray Muñoz, cantaora del Ballet Nacional, rememora la figura de su madre, mitad del dúo gitano que revolucionó el rock español. Tina será homenajeada el jueves en Madrid.
Elsa Fernández-Santos | El País, 2017-11-16
https://elpais.com/cultura/2017/11/14/actualidad/1510676149_979504.html 

Pocas historias hay en la música española comparables al culebrón de las hermanas gitanas Carmela y Tina Muñoz Barrull, Las Grecas. El brutal impactó que en 1973 causó la canción 'Te estoy amando locamente' —se vendió medio millón de copias, influyó en el legendario ‘Entre dos aguas’, de Paco de Lucía, y dejó boquiabierto al mismísimo Camarón— llega a nuestros días: el tema se sigue bailando y coreando con furia en fiestas y karaokes. Con sus arreglos eléctricos, sus dos voces al unísono y sus peculiares meneos, Las Grecas transgredieron con sus modos y expresiones gitanas. Cuarenta años después, su modernidad se resiste a envejecer.

En 1995, Tina fallecía a los 38 años. Su hija mayor, Saray Muñoz, tenía entonces 19 y este jueves, después de toda una vida intentando digerir el desastre, encabezará en un concierto celebrado en la sala Shoko de Madrid (calle Toledo, 86, a las 21.00) el primer homenaje dedicado a su madre. Cantaora del Ballet Nacional de España desde 2012, Saray (‘Mi niña Saray’, le escribió en una canción su madre) estará acompañada por músicos y bailaores como Jorge Pardo, Farruquito, Rafa6el Amargo, Azúcar Moreno o Mayte Maya. “Las Grecas fueron un vendaval”, dice. “Se vestían como les daba la gana y escribían sus locuras. La fama les llegó siendo unas crías. Las usaron y ya”.

Criada por su abuela Felicitas, una vendedora ambulante “con las uñas muy largas y siempre supermaquillada", Saray creció con la ausencia de su madre. “Yo nací en pleno ‘boom’ de ‘Te estoy amando locamente’ y ella estaba poco en casa. Las dos sentíamos una necesidad mutua que duró toda su vida. Luego se puso enferma y, no sé si con acierto o no, intentaron protegerme. Durante unos años dejé de verla. Hasta la recta final, en la que tuve la suerte de poder acompañarla. Estuve sola con ella porque mi abuela le había cogido miedo, y aunque fue muy duro me alegraré siempre de haber recuperado el contacto”.

Tina Muñoz falleció en un centro de acogida de Aranjuez, después de vivir todo tipo de episodios lamentables derivados de la esquizofrenia paranoide que padecía. “Sobre mi madre se han contado muchas mentiras. Es verdad que la enfermedad la volvía agresiva. Pero se ha hablado demasiado de drogas y alcohol cuando la realidad es que murió de sida. El sida es un tabú en el mundo gitano y por eso no se dice, pero yo no quiero que las mentiras se tapen con más mentiras”.

Saray recuerda que su madre era tan moderna y rebelde —“y eso siendo gitana era muy fuerte”— que las relaciones con los hombres nunca fueron sencillas. “Con mi padre no tuve contacto, era un maltratador. Su historia fue corta y horrible. Sé quién es pero no he querido tratarlo. Entre gitanos cuando pasa algo así las familias no vuelven a mezclarse. Y lo suyo fue brutal. A los 30 años lo conocí, me dio mucho asco. El mejor compañero de mi madre fue un iraní, el padre de su tercera hija, Begoña. Un hombre muy bueno, que la mimaba y cuidaba mucho. Pero ella ya estaba muy mal y acabaron dando en adopción a Begoña. Solo yo y mi hermana Tamara permanecimos juntas. Las pequeñas, gemelas, las dieron también en adopción. Nunca las llegué a conocer”.

De la panadería al escenario
Mientras acaba el espectáculo 'Sorolla', en el Teatro Real, y ensaya ‘Electra’, en La Zarzuela, Saray explica que al principio rechazó la música por instinto. “Yo trabajaba feliz en una panadería de Torrejón hasta que mi tía me llamó para acompañarla en sus giras para revivir Las Grecas. Acepté. La primera vez que me subí a un escenario solo recuerdo una cosa: no me dio ningún corte. Pero aquello no fue una buena idea, y yo lo pasé muy mal, solo abría más la herida que tenía dentro. Y mi tía no me ayudaba. Era incapaz de abrazarme y consolarme. Ganaba 130.000 pesetas por cada concierto, era mucho dinero, pero pagaba un precio mayor. Cuando lo dejé empecé a cantar en un tablao. Solo ganaba 5.000, pero era feliz. Necesitaba estar lejos de Las Grecas. Seguí cantando hasta que entré por concurso en el Ballet Nacional, era mi sueño. Hasta hace poco, era incapaz de decir que Tina era mi madre”.

En estos días, además de organizar el concierto-homenaje, Saray ha visto vídeos de YouTube que hasta ahora le resultaban insoportables. En uno de ellos, de 1984, José María Íñigo entrevista a su madre. Le pregunta por unas fotografías en las que ella sale malviviendo en la calle. La cantante se remanga y con orgullo le responde que ella es una ‘hippie’, que pide dinero y va descalza por la calle porque le encanta. “Busqué una vida diferente para mí. Pero de pordiosera nada, es bonito dormir en la calle”. Saray sonríe: “¡Esa es mi madre!”.

2017/11/03

LIBROS | Calvo Borobia, Kerman | ¿Revolución o reforma? La transformación de la identidad política del movimiento LGTB en España

Calvo Borobia, Kerman (2017) [11-03]. ¿Revolución o reforma? La transformación de la identidad política del movimiento LGTB en España, 1970-2005. Madrid: CSIC.


Esta obra estudia el activismo en defensa de los derechos de las personas lesbianas, gais, transexuales y bisexuales (LGTB) en España, en un largo periodo comprendido entre la década de 1970, cuando aún de manera clandestina se puso en marcha este tipo de activismo, y 2005, fecha marcada por la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo. A partir de la curiosidad de la sociología por las nuevas formas de protesta y acción colectiva, el trabajo presta particular atención a los objetivos y las aspiraciones de un movimiento social que ha sido decisivo en la defensa de los intereses del colectivo LGTB español. Mediante una investigación detallada de los orígenes, evolución, repertorios de protesta y marcos de movilización impulsados por estos activistas, no solo se recorre una historia aún poco conocida, sino que, principalmente, se aspira a explicar la transformación del movimiento LGTB español en un miembro del sistema político: es decir, en un actor comprometido con el tipo de juego institucional definido por la búsqueda de objetivos políticos vistos como legítimos, la renuncia a formas de protesta disruptivas y, en general, la aceptación de los protocolos diseñados por las instituciones para la normal defensa de intereses en la esfera pública. En la apuesta por el reformismo y el pragmatismo, el activismo LGTB ha ido abandonando paulatinamente su alma más revolucionaria, en un proceso que ha sido complejo, a menudo traumático, pero al mismo tiempo decisivo para entender muchos de los cambios recientes indisolublemente ligados a las decisiones estratégicas y organizativas del activismo LGTB español.

MIKEL/A, AQUÍ ESTAMOS Y NO NOS OCULTAMOS

Mikel/a enseña cacho en la 2ª Gayakanpada de EHGAM, 27-29 agosto 1993, Muxika // Este trabajo, no podría ser de otra manera, está dedicado e...