Un hombre de 43 años, asesinado a puñaladas en su domicilio.
Andres Manzano | El País, 1986-10-13
https://elpais.com/diario/1986/10/14/madrid/529676664_850215.html
Andres Manzano | El País, 1986-10-13
https://elpais.com/diario/1986/10/14/madrid/529676664_850215.html
El cuerpo sin vida de Ángel García Alija, de 43 años de edad, soltero, que vivía en la planta 13 del número 9 de la plaza del Doctor Laguna, fue encontrado a las 9.30 de la mañana de ayer por el portero del inmueble, caído en el salón de su apartamento, vestido sólo con unos calzoncillos y cosido a puñaladas, según la expresión de una persona, vecina del muerto, que pudo contemplar el cadáver mientras la policía estuvo en el apartamento. El hombre ocupaba el apartamento E de la planta 13 del inmueble citado. Vivía solo, aunque, a tenor de las declaraciones de vecinos, recibía con frecuencia la visita de grupos de hombres y se especulaba con su condición de homosexual. De hecho, vecinos de la misma planta escuchaban a través de las ventanas -la ventana de la cocina, esquinada, permite escuchar sin demasiados problemas conversaciones en el piso contiguo- conversaciones plagadas de expresiones propias de homosexuales.
El cadáver fue encontrado por el portero, que se sorprendió de encontrar la puerta del apartamento abierta, y entró a ver qué pasaba. Según las primeras informaciones de la Jefatura Superior de Policía de Madrid, el cuerpo sin vida de Ángel García Alija se encontró vestido sólo con unos calzoncillos, tendido en el suelo del salón, cerca de un sofá, y cubierto de puñaladas. Una de las personas que, mientras llegaba la policía, tuvo acceso al apartamento aseguró que no eran varias, sino numerosas puñaladas, y que muchas de ellas estaban muy juntas y de poca profundidad, por las piernas, como si el homicida o los homicidas hubieran pespunteado el cuerpo con un cuchillo.
Al parecer, en el apartamento se encontró el mango de un cuchillo de cocina, y la sangre estaba todavía sin coagular, lo que parece apuntar a que el homicidio se cometió poco antes de ser descubierto.
El muerto tenía una especie de agencia de colocaciones y compraventas y vivía con cierto desahogo. Según quienes le conocieron, era alto, el pelo rubio ya un tanto canoso, bien plantado y una persona muy educada en el trato. El inmueble es un moderno edificio de quince plantas situado en una urbanización muy cuidada, a la izquierda de la calle del Doctor Esquerdo.
El cadáver fue encontrado por el portero, que se sorprendió de encontrar la puerta del apartamento abierta, y entró a ver qué pasaba. Según las primeras informaciones de la Jefatura Superior de Policía de Madrid, el cuerpo sin vida de Ángel García Alija se encontró vestido sólo con unos calzoncillos, tendido en el suelo del salón, cerca de un sofá, y cubierto de puñaladas. Una de las personas que, mientras llegaba la policía, tuvo acceso al apartamento aseguró que no eran varias, sino numerosas puñaladas, y que muchas de ellas estaban muy juntas y de poca profundidad, por las piernas, como si el homicida o los homicidas hubieran pespunteado el cuerpo con un cuchillo.
Al parecer, en el apartamento se encontró el mango de un cuchillo de cocina, y la sangre estaba todavía sin coagular, lo que parece apuntar a que el homicidio se cometió poco antes de ser descubierto.
El muerto tenía una especie de agencia de colocaciones y compraventas y vivía con cierto desahogo. Según quienes le conocieron, era alto, el pelo rubio ya un tanto canoso, bien plantado y una persona muy educada en el trato. El inmueble es un moderno edificio de quince plantas situado en una urbanización muy cuidada, a la izquierda de la calle del Doctor Esquerdo.
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